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Guía completa sobre autoconsumo: ventajas, funcionamiento y opciones

El interés por la eficiencia energética, la sostenibilidad y la protección del medio ambiente ha calado profundamente en la sociedad actual. En este contexto, el autoconsumo se presenta como una alternativa práctica y efectiva para los hogares, permitiendo la generación de energía de forma independiente y reduciendo el impacto ambiental. Pero, ¿en qué consiste exactamente? En Finques Polinyà te lo explicamos.

 

El autoconsumo es un modelo energético en el que los usuarios generan su propia energía, generalmente a través de fuentes renovables como paneles solares o aerogeneradores pequeños. Esto les permite cubrir sus necesidades energéticas sin depender completamente de la red eléctrica convencional, lo que también reduce el uso de combustibles fósiles y los costes asociados.

 

El funcionamiento de un sistema de autoconsumo es sencillo: se instalan dispositivos como paneles solares o aerogeneradores que convierten los recursos naturales en electricidad. Esta energía es utilizada directamente en el hogar, y cualquier excedente puede ser vertido a la red eléctrica, lo que genera compensaciones económicas. Además, el sistema se puede complementar con baterías de almacenamiento y dispositivos de gestión que permiten controlar la producción y consumo de energía a través de aplicaciones móviles.

 

Existen varias opciones de autoconsumo, siendo las más comunes el autoconsumo fotovoltaico, que utiliza paneles solares para transformar la luz solar en electricidad, y el autoconsumo minieólico, que aprovecha la fuerza del viento a través de pequeños aerogeneradores. También es posible aprovechar fuentes hídricas, como el agua de lluvia, pozos o aguas grises, para cubrir las necesidades de agua del hogar.

 

Dentro del autoconsumo, existen dos modalidades: sin excedentes, donde la energía no utilizada no se transfiere a la red, y con excedentes, donde el excedente de energía se inyecta a la red y se recibe una compensación económica.

 

Entre los principales beneficios del autoconsumo destacan el ahorro económico, una mayor eficiencia en la gestión energética, la reducción de la huella de carbono y la contribución a la creación de empleo en sectores sostenibles. Con la instalación de sistemas de autoconsumo, se puede llegar a ahorrar entre un 40% y un 60% en la factura eléctrica a lo largo de la vida útil de los dispositivos.